
6 de mayo de 2013. Mucho interés hay en los medios por conocer nuestro punto de vista sobre el “Gasto Hormiga” de los consumidores mexicanos, quizá por estar a unos días de uno de los festejos que generan más consumo en el año: el Día de las Madres que más bien pareciera el Día del Comerciante.
Me remito, en primer término a la estadística del INEGI, relativa a los ingresos y egresos de los hogares mexicanos al 2010, última disponible.
Para empezar, la mala noticia es que el ingreso promedio por hogar mexicano disminuyó 12.3% respecto del año 2008. Sí, leyó bien, de un ingreso promedio mensual por hogar de $13,250 pasamos a uno de $11, 645, en 2010, a nivel nacional. El ingreso promedio por hogar, en el decil más bajo siendo de $6014, y el más alto, de $118,713. Agréguenle la pérdida de poder adquisitivo por efecto de la inflación en esos tres años y el resultado sería aún más triste, menos ingresos en todos los deciles.
Ahora vayamos al gasto de los hogares en 2008 y 2010, también de acuerdo al INEGI. El gasto promedio mensual por hogar en 2010, fue de $10,420, contra un gasto un poco mayor al 2008, de $10,603, pero que revela que los mexicanos gastaron casi al mismo nivel a pesar de que sus ingresos disminuyeron el 12.3 por ciento.
¿En qué gastaron los hogares mexicanos en 2010?
Alimentos, bebidas y tabaco 32.7%
Transportes y comunicaciones 18.5%
Vivienda y combustibles 9.3%
Cuidados personales 8.2%
Artículos y servicios para casa 6.2%
Salud 2.7%
En cuanto a alimentos, el mexicano gasta el 45% en carnes, lácteos y huevos; 35% en harinas, azúcares y grasas, sólo 11% en verduras, leguminosas y semillas; 9.4% en bebidas de todo tipo y 0.7% en tabaco.
Podemos sacar varias lecturas de los datos revelados, una primera, es que para el decil de ingresos más bajos el gasto en alimentos, bebidas y tabaco es del 47.4% mientras que para el decil más alto es tan solo del 21.7% pues gastan más en educación y esparcimiento y en transporte que el decil I. Otras lecturas relevantes:
En el contexto de la malnutrición del mexicano, derivada de la ingesta altísima de azúcares y harinas refinadas, y bebidas carbonatadas y el bajo consumo en verduras y leguminosas, el gasto hormigón en comida chatarra tiene graves efectos no solo en la economía familiar de corto plazo, sino que esa dieta alta en carbohidratos casi inevitablemente llevará a mexicanosy mexicanos a un alto gasto en atención médica, medicamentos, análisis e incluso cirugías por problemas de obesidad, diabetes, trstornos cardiovasculares, reumáticos.
¿Sabían que el consumo promedio anual de refrescos por mexicano es de 163 litros (casi medio litro al día) a $21 por litro? O sea, se gasta al año $3260 en refrescos, cuando podría tomar 2 litros de agua simple, fresca o té casero sin azúcar por una fracción del costo y grandes beneficios a su salud. Y a los que sí toman agua diariamente por favor lleven consigo un termo de acero inoxidable para no comprar agua embotellada también muy cara y con envases contaminantes.
Siguiendo con el gasto en bebidas no alcohólicas, en deciles medios y altos, hay quienes consumen diariamente un aproximado de $40 tan solo en cafés de marca,. Un café con crema, capuccino o latte cuesta en promedio $40, si alguien consume 6 a la semana, son $240 y $960 al mes! Un kilogramo de café de grano arábiga, de altura, en promedio anda en$180 y produce por lo menos 100 tazas, o sea $1.80 por taza y de una buena calidad.
Otros gastos hormigón son los cigarros a $42 pesos por cajetilla más los gastos médicos para tratar enfisema, cáncer, hipertensión, atrofia de dientes y encías, entre otros que lamentablemente causarán. Un fumador asiduo, gastaría al mes $1260 al mes por 30 cajetillas. El costo de una cuota mensual en gimnasio de lujo!
En el rubro de comunicaciones, que si bien son muy necesarias en todos los ámbitos, por favor hay que pensar dos veces cuando escogemos equipo, plan, compañía y aplicaciones. El gasto en telefonía móvil sin conocer los patrones personales de consumo, necesidades reales de envío de datos, voz y mensajes ni comparar tarifas y calidad de los cuatro operadores, resulta en un gasto excesivo y estéril que puede superar los $500 mensuales.
Muchas personas, eufóricas con su radiante smartphone que creen que les da un status social hasta que les llega la primera factura, adquieren equipos de 10,000 pesos o más atado a un plan de 2 años “ilimitado” de alrededor de $1150 mensuales para no errarle y tener “tiempo y datos ilimitados” cuando en muchas ocasiones no consumen ni el 50% . regalándole así su ingreso a la feliz empresa que lo incentivó a tomar el plan más alto.
¿Sabías que puedes contratar el plan más económico y después ir escalando si no fue suficiente pero no puedes hacer lo contario, migrar hacia un plan más pequeño? Y en prepago aguas, ahora las nuevas tarifas de Telcel castigan los bajos consumos y premian los grandes abonos de tiempo aire. Chécate sus nuevas tarifas prepago.
Otro gasto hormigón son los “pesitos” que quedan de saldo inutilizable en las tarjetas telefónicas como Ladatel para usar en casetas públicas y que cuando les queda $2 o menos de la tarifa minima por llamada, bingo! es ganancia para Telmex -principalemente- y pérdida para el consumidor que no puede redimir el saldo. ¿No será eso enriquecimiento ilegítimo Señor Procurador?
La merma en litros de gasolina y gas L.P. que las gasolinerías y las compañías gaseras, -que Profeco calcula en un 10 a 20% por litro- es un impuesto extra al ya de por sí alto precio de estos combustibles que apenas el día 4 de mayo subió nuevamente. Te sugiero buscar medidores alternativos de gas y monitorear una sola gasolinera a la vez, borra tu kilometraje cada vez que cargues gasolina y haz cuentas.
Y no olvidemos otro gasto no hormiga sino tarántula derivado de alto consumo o cobro de luz eléctrica ya sea por que desperdicias mucha luz o bien por que la CFE te metió gol en tu recibo, en tu medidor o por que su sistema de facturación, oops metió un 0 de más. Haz tus propias lecturas semanales. El objetivo debería ser en los hogares no pasar de 240 kwh mensuales para que la tarifa unitaria no brinque a tarifa DAC que es de más de $3.50 contra una de $2 aproximadamente.
Las compras compulsivas a crédito de servicios a largo plazo y alto pago de las que luego se arrepiente el consumidor mas no puede cancelar, tales como: tiempos compartidos, autofinanciamientos que rallan en autofraudes; tratamientos para adelgazar, suscripciones a revistas, televisión de paga y planes celulares, cursos de idiomas u otros, remesas, seguros médicos abusivos, sin antes comparar ni hacer un presupuesto familiar.
Los estacionamientos (a $20/hora aproximadamente) en centros comerciales a los que van los conductores a consumir cuando no hay dónde estacionarse afuera y en cualquier país del mundo los centros comerciales con tal de atraer a consumidores, les proveen en forma gratuita el estacionamiento.
El peaje en autopistas urbanas que antes no existían pero que ahora en ciertas rutas es imposible transitar obligando al conductor a pagar por altas cuotas por unos cuanto s kms.
Otros artículos muy demandados por mujeres que implican un gasto hormigón y bastante estéril son las cremas y tratamientos faciales elegantemente empacadas que representan una industria multimillonaria a nivel global, y que no aportan más que los aceites naturales como el de oliva, ricino, girasol y almendras y sávila, que combinados con la ingesta de por lo menos 2 litros de agua simple y una dieta rica en verduras, mejora notablemente la piel así como un protector solar de uso diario.
¿Cuántos de tus consumos son el resultado de necesidades creadas por la publicidad y emular al vecino y cuántos para cubrir necesidades que te harán más saludable, más libre, más educado, más productivo, más humano y más sustentable a tí y a tu familia?
Recuerden: No es más rico quien más ingresos tiene sino quien mejor gasta, invierte y ahorra.
Para este Día de las Madres (como si los otros 364 no lo fueran) regálenle a la suya lo más valioso y escaso: Su tiempo.
Comentarios